Puntas de ballet: cómo cuidarlas correctamente
El ballet es una de las disciplinas de baile más demandadas, tanto por niños como por adultos. Las puntas de ballet, el zapato específico para este baile es delicado y necesita cuidados para que duren el máximo tiempo posible. ¿Quieres saber cómo llevarlos a la práctica para cuidarlas al máximo?
Cuidados para las puntas de ballet
Las puntas de ballet no son un zapato cómodo, pero sí necesario para bailar este tipo de danza, por lo que cuando has encontrado unas con las que te sientes bien y puedes moverte libremente, no querrás deshacerte de ellas. Por ello, contar con unos trucos y consejos para que te duren lo máximo posible seguro que te encantará. ¡Aquí los tienes!
Aléjate de la humedad
Cuando bailas los pies sudan, de hecho, se cree que cada pie puede expulsar la cantidad de sudor correspondiente a medio vaso de agua. Por ello, cuando se termine la clase, guarda las puntas en una bolsa de rejilla y en cuanto llegues a casa, sácalas y ponlas en un sitio fresco y aireado.
Olvida el calor
Si no te ha dado tiempo a lavar y secar tus puntas de ballet, no se te ocurra meterlas en la secadora, ponerlas en el radiador o darles con un secador. Los materiales con los que se elaboran las puntas son delicados y no resistentes al calor. No las dejes en sitios donde predomina la humedad como la cocina o el baño. Ponlas en un sitio fresco y aireado como un dormitorio con las ventanas abiertas.
Deja que se oreen
Aunque en el mercado hay distintos tipos de bolsas en las que guardar las puntas de ballet, elige aquellas de rejilla y transpirables que impiden que se acumule humedad. No uses las de tejido sintético que pueden hacer que se estropeen.
Evita el desgaste
Cada vez que vas a clase debes llevar tus puntas de ballet, por lo que, probablemente se desataran fácilmente. Para evitarlo usa unos calcetines especiales que encontrarás en varios colores. Estos cubren las puntas y evitarán que resbalen y que se estropeen rápidamente mientras estás en clase.
Usa refuerzos
Es probable que necesites encontrar unas puntas de ballet más duras, pero las que tienes se pueden reforzar de varias maneras. Tu profesora te dirá cuál es la mejor manera de hacerlo, ya que si no se hace correctamente se podrían estropear. En clase estarán encantados de echarte una mano.
Ten unas de repuesto
Para salvaguardar lo máximo posible esas puntas de ballet que te encantan, lo mejor es que tengas dos y que vayas cambiando mientras lavas unas. Además, evitarás que se deformen, ya que el desgaste se repartirá.
Aprende a doblarlas
No las dobles como llegaron de la tienda, la forma correcta de hacerlo es doblando el talón hacia dentro, después los laterales y luego las puntas.
Si sigues estos consejos podrás mantener en muy buen estado tus puntas de ballet por más tiempo. Y recuerda, en nuestra academia encontrarás los mejores profesores de ballet que te echarán una mano en los que necesites.