Quemar grasa bailando es posible con estos consejos

Quemar grasa bailando no solo es posible, sino que además es fácil. El baile requiere energía porque es muy exigente con los músculos, lo que implica que hay que sudar y quemar calorías, especialmente si escogemos bailes con ritmos rápidos.

Bailar como alternativa a otros deportes

¿Llevas meses buscando una rutina de ejercicio que te permita bajar de peso sin sufrir demasiado y que además te aporte algo de diversión? El baile es lo tuyo. Pon tus canciones preferidas y empieza a moverte al ritmo de la música, porque debes saber que puedes quemar las mismas calorías que practicando deportes como ciclismo, atletismo o natación. Otro motivo por el que optar por el baile es que se tonifican los músculos, mejora la coordinación y el equilibrio y nos libra del estrés de forma radical.

¿Por qué es mejor bailar que practicar rutinas como natación o jogging? Por una sencilla razón, y es que el baile tiene la capacidad de mejorar el estado de ánimo. Nos ayuda a desestresarnos y desconectar, así como a eliminar poco a poco los complejos físicos.  Algunas personas se pueden sentir intimidadas e inseguras ante la idea de no ser capaz de seguir el ritmo o coordinar movimientos. Hay que tener presente que todo el mundo empieza con dificultades, pero el progreso se aprecia tan rápidamente, que en pocas sesiones el desarrollo de la coreografía será mucho más resuelto y divertido.

Quemar grasa bailando: ¿cuántas sesiones hacen falta?

La frecuencia recomendada son dos clases a la semana, si queremos perder peso. Aunque esta cifra depende del tipo de baile que hayamos escogido. Cuanto más dinámico sea el estilo, más rápido se verán los resultados, aunque es importante elegir en función de nuestras preferencias, más que por objetivo de perder peso. Si no nos encaja demasiado un estilo de baile, aunque sea eficaz para quemar muchas calorías en una sola sesión, terminaremos abandonando en poco tiempo.

Hay que pensar a largo plazo y encontrar aquel que se convierta en nuestro hobby, que nos encante y nos enganche tanto que no queramos perder ni una sola sesión. Otro punto a tener en cuenta si queremos quemar grasa bailando, es que hay que combinar este ejercicio con otros hábitos saludables, como cuidar la alimentación e incorporar otras actividades físicas además del baile. Olvidarse del ascensor, caminar hasta el trabajo, dar paseos en bici… ¡Hay muchas opciones!

Consejos para bailar en casa

Existen diversos motivos por los que en ciertos momentos no podemos ir a clase. Pero eso no es excusa para saltarnos una sesión de baile. Siguiendo algunos consejos podemos hacer nuestra rutina de ejercicios en casa sin problema y consiguiendo que sea igual de eficaz.

• Preparar el espacio donde vamos a bailar. Si es necesario, moveremos sillones o mesas para tener amplitud y libertad de movimientos sin riesgo de golpes.
• Como con cualquier otro deporte, para una sesión de baile conviene utilizar ropa adecuada, cómoda y transpirable.
• La mejor forma de motivarse es crearse una playlist con las canciones que más nos gusten, esas que nos elevan y nos cargan de energía.
• No hay que desanimarse si los pasos no salen a la primera, ni a la segunda. Poco a poco se mejora.
• Hay que bailar sin interrupciones, para no perder el ritmo. Así que hay que escoger el momento en el que sepamos que podremos hacer nuestra sesión del tirón de principio a fin.
• Es aconsejable hacer un poco de calentamiento antes y después, para prevenir lesiones.

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