Cómo beneficia el baile a tus músculos
Ya hemos hablado en muchas ocasiones de lo saludables que son los bailes de salón. Lo haremos en esta ocasión de un modo un poco más específico. Os mostraremos cómo bailando se realizan tres tipos de ejercicio físico: cardiovascular, de fuerza y estiramientos.
Cómo el baile aumenta tu fuerza muscular:
Piensa que al bailar lo que estás haciendo es usar tus músculos. Ejercitas diferentes grupos musculares dependiendo de qué baile hagas. Por ejemplo, el Kizomba hace mucho hincapié en el tren inferior. La danza del vientre pone más énfasis en el tren superior. El flamenco ayuda a desarrollar todo el cuerpo, ya que por una parte está el zapateado y por otra los movimientos de brazos y espalda.
Al repetir estos movimientos tu fuerza muscular aumenta. En una clase de baile lo más probable es que, de hecho, ejercites todo el cuerpo. Es decir, pondrás en movimiento muchos grupos musculares, lo que supone un entrenamiento de fuerza completo. La intensidad no será tan grande como si levantaras pesas, pero sí tiene otras ventajas. Por ejemplo, que el baile respeta las articulaciones, mientras que otros tipos de ejercicio suelen comprometerlas.
Además, el baile también beneficia a los huesos, aunque el beneficio para ellos es visible más a largo plazo. Pero incluso existe evidencia de que el ejercicio físico como el baile ayuda a prevenir el desarrollo de algunas enfermedades, como la osteoporosis.
El baile también aumenta tu resistencia: es un ejercicio aeróbico
Si ha pasado algún tiempo desde la última vez que hiciste algo de ejercicio y empiezas a bailar, es posible que las primeras clases te resulten un poco cansadas. Es normal. El cuerpo necesita habituarse a nuevas formas de trabajo. Pero el baile, como el resto de ejercicios aeróbicos, aumenta tu rimo cardiaco y aumenta también la capacidad de tu cuerpo para recibir oxígeno. Así, lo que sucede es que, poco a poco, serás capaz de realizar una actividad física, en este caso bailar, durante más tiempo.
Cuanto más bailas, menos te cansas. Esto, por supuesto, significa que también se queman calorías. Aunque la finalidad del baile sea la diversión y el aprendizaje, tampoco está mal que nuestro cuerpo se vea más delgado y bonito.
Adquirir más flexibilidad bailando
Los músculos pierden flexibilidad cuando no se mueven. La conclusión lógica, por tanto, es que bailar los hará más flexibles. Además, todos los tipos de baile necesitan ejercicios previos de calentamiento y ejercicios posteriores de estiramiento. Este tipo de ejercicios mejora la flexibilidad y por tanto el bienestar general.
Por todos estos motivos no importa el estado físico que te encuentres cuando empiezas a bailar bailes de salón. Tu cuerpo mejorará tanto en fuerza, como en resistencia y flexibilidad. No es necesario que empieces tus clases en el estado de forma de un deportista de élite. Poco a poco verás que los límites de tu cuerpo se expanden, te sentirás mejor contigo misma y querrás seguir bailando.
Pero, sobre todo bailando bailes de salón te divertirás y ni siquiera te darás cuenta de que estás haciendo ejercicio.