Cómo se hace una coreografía

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Seguro que alguna vez te has preguntado como se hace una coreografía, si te gusta el baile. La danza, al igual que otras disciplinas artísticas, se tiene que escribir. Y esto es lo que llamamos coreografía, una palabra cuyo origen etimológico viene del griego y se compone de los términos ‘choros’ (χορος) que significa danza y ‘ grafia’ del sustantivo ‘γραφη’ (grafi), escritura.

Cada coreografía se efectúa sobre una planigrafía. Es decir, reflejando sobre papel los movimientos, los pasos y las posiciones. Para ello se requiere conocer una serie de sistemas de notación, tanto para saber plasmar la información como para leerla. Sería algo así como el solfeo del baile.

La planigrafía

Existen diversos métodos de notación y han ido variando a lo largo del tiempo. Fue en el siglo XVI cuando se comenzó a intentar anotar las coreografías. El francés Thoinot Arbeau publicaba en aquellos días su “Orchésographie” donde proponía algunas ideas para sistematizar las figuras y los distintos pasos de baile. Para ello utilizaba una combinación de ilustraciones, letras y palabras. Después, Feuillet, desarrolló el método en su obra “Chorégraphie ou L’Art de décrire la dance”. Incluía representaciones de la progresión de los bailarines sobre el suelo y descripciones de los movimientos de las piernas en relación al grupo y a la medida musical.

En la actualidad se emplean hasta cuatro sistemas diferentes de planigrafía:

  • Notación de Wachmann
  • Notación de Conté
  • Notación de Benesh
  • Notación de Laban

Pero vamos a ver con más detalle cómo se hace una coreografía.

Cómo se hace una coreografía

Una vez elegido el tema musical y el estilo, lo que debemos hacer es escoger las rutinas adecuadas y los pasos de baile. Entonces se comienza a trabajar en función de la pieza de música. Para ello hay que delimitar  las distintas secciones del tema e identificar la estructura de la canción y las distintas repeticiones. Muchos coreógrafos, le ponen nombre a estas partes diferenciadas de la pieza musical.

Después de esto hay que empezar a bailar. Se recomienda utilizar una cámara de video para grabar los pasos y movimientos que van surgiendo de manera improvisada. Así, al hacer un visionado se pueden seleccionar aquellos que más nos satisfacen y pasar ya a anotarlos sobre papel. Hay que trabajar la linea de los pies y después ir añadiendo los movimientos de la cabeza, los brazos o las partes del cuerpo que participan. A continuación se va practicado para ir haciendo los cambios y los ajustes que sean oportunos para que la coreografía sea armoniosa.

Las coreografías básicas que existen en danza pueden ser de dos tipos: monólogas o grupales. Como habrás podido deducir, la coreografía monóloga es la composición en la que interviene una sola persona y la grupal es la que define la acción de un grupo de bailarines. Existen más tipos de coreografías, en función del tipo de escenografía que se vaya a representar.

En muchos casos, los coreógrafos son también bailarines, pero no siempre tiene por qué ser así. En Dance Emotion tenemos la suerte de contar con excelentes coreógrafos profesionales que saben sacar lo mejor de cada alumno en la pista de baile.

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Comments
  • Karianny
    Responder

    Bien explicado

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