Beneficios de las clases de baile para el rendimiento escolar de los niños
Además de ser divertido, ir a clases de baile es muy beneficioso para los niños. Aprender a bailar no sólo les permitirá practicar una actividad entretenida. También les aportará muchas ventajas tanto para su salud como para su bienestar emocional. Y no sólo eso, también son beneficiosas para mejorar su rendimiento escolar.
El baile hace que los niños adquieran una serie de habilidades que les ayudará después en sus estudios. Y no sólo en las asignaturas relacionadas con la educación física. También con las relacionadas con las artes plásticas. Y en general, con todas las relacionadas con la creatividad.
Clases de baile, buenas para el rendimiento escolar
La práctica de clases de baile desde una edad temprana, al ser una disciplina que fomenta la creatividad, ayuda a los niños a apreciar más todo lo relacionado con el arte. Además, al ofrecerles una forma de dar rienda suelta a sus sentimientos, les ayuda a mejorar a la hora de expresarse. Todo esto no sólo les ayudará en el futuro, sino que también les ayudará de manera inmediata, en su día a día en clase. Se expresarán mejor gracias a una mayor creatividad y a una mayor libertad a la hora de expresarse al bailar, que también mejora la capacidad de comunicación oral.
Además, para aprender a bailar de manera correcta hay que tener mucha disciplina y un buen nivel de concentración. Los pequeños aprenden ambas cosas en las clases de baile. Gracias a esto, cuando tengan que estudiar o realizar tareas en clase que requieran estar centrados en ellas, ya cuentan con la disciplina necesaria para concentrarse adecuadamente.
Aprendizaje de conceptos básicos
En las clases de baile, los niños más pequeños se inician en conceptos básicos que les servirán para sus primeros pasos en el colegio. Por ejemplo, aprenderán sus primeros números y a contar. También la diferencia entre derecha e izquierda, y a reconocer el espacio que les rodea. También serán capaces de establecer (o de seguir) una cronología. Y comprenderán el significado de expresiones como antes, después o ahora. Incluso interiorizarán conceptos como deprisa o despacio, arriba y abajo, dentro y fuera, o rápido y lento.
Otra de las habilidades que aprenderán los pequeños con las clases de baile es el autocontrol, muy importante para perseverar y no desesperarse cuando se les resiste algo. Así se enfadarán menos cuando alguna materia se les atragante. La mejora de su autoestima, otra de las ventajas que les aporta el baile, les ayudará a sobreponerse cuando algo les resulte complicado y a seguir intentando dominarlo. Y también contarán con mejor memoria. La práctica del baile hace que tengan que recordar coreografías más o menos complicadas, lo que ayuda a ejercitarla.
No importa el tipo de baile que practiquen los pequeños. Tanto la danza clásica como la moderna les aportarán habilidades y conceptos muy importantes de cara a su trabajo en el colegio. Sólo tienen que elegir el estilo y tipo de baile que más les guste. Y claro está, que resulte más adecuado para su edad.